La balsa se utilizará para el riego de los árboles frutales de la finca Moratalla. Tiene una capacidad de 998.000 m³. Su superficie al ser un prisma va de 6,5 hectáreas en el interior hasta las 14 hectáreas en el muro exterior. La altura es de 15 m. El embalse y los muros que lo sostienen se encuentran protegidos por una malla metálica de protección que rodea el perímetro con el fin de evitar la entrada de animales que pudieran dañar y poner en peligro la seguridad del proyecto. Está previsto que las hierbas silvestres crezcan y arraiguen cubriendo la superficie de las pendientes para evitar su erosión; en los inicios de la excavación, para facilitar este tapiz, se fueron volcando allí los camiones con cubierta vegetal extraída del fondo.
El proyecto es 100% sostenible porque recogeremos el agua que el río recibe en invierno y tira al mar para almacenarla durante los meses de lluvia y así regar en verano. Además se aprovecharán las aguas que el rio desecha, favoreciendo la recuperación de los acuíferos durante los meses más secos. La balsa contribuirá también a un ahorro importante de energía, ya que usaremos las horas con menos demanda para descargar el agua.